Cuando acabé de hablar me di cuenta de que estaba siendo amiga de quien no se preocupaba por mi, hacia una semana que no nos veíamos y Noelia no se habia ni preocupado en llamarme o consultar como estaba. Por mi orgullo, asqueroso orgullo, yo tampoco la llamé. ¿Por qué tenia que ser yo? ¿Yo siempre tenia que dar el primer paso? Estaba harta, siempre que habia una discusión ella dejaba de hablarme, me ignoraba y siempre tenia que ser yo la que fuera detrás de ella pidiéndole perdón por lo que yo tampoco sabia que había hecho y preguntarle el porque de su enfado. Pero yo, por muy estúpida que Noelia fuera la perdonaba. Pasaba por alto sus enfados y solo miraba la parte buena de ser su amiga, la verdad es que ella (a ratos) me hacia más feliz, con ella encontré mi lado infantil (el de diversión, bromas..) y mi interior empezó a cambiar.
A Noelia le quedaban dos días exactamente para llamarme o darme señales de vida y sino nos veriamos en el instituto...espero una buena excusa.
*Gracias por leer el primer capítulo!
Me pasa esactamente igual que a la chica! Me encanta!
ResponderEliminar